Pastas danesas fáciles

Estas deliciosas pastas danesas, que seguramente todos conocéis, son ideales para acompañar el café o el té por la tarde, incluso para desayunar, son muy ligeras y siempre gustan a todos, mayores y pequeños, más si las hacéis de sabores variados. Son muy sencillas de elaborar, aunque hay que preparar la masa el día antes.
La receta original no lleva vainilla pero os recomiendo ponerla porque mejoran muchísimo, son las mismas de siempre pero a la vez diferentes con el toque de vainilla.

La receta es del libro "1026 recetas de cocina internacional" de la editorial Blume. Espero que os animéis a hacerlas y las disfrutéis tanto como nosotros!!!!

INGREDIENTES (18 uds.):

4 1/2 cucharaditas de levadura en polvo
75 grs. de azúcar
125 ml. de agua templada
600 grs. de harina de fuerza
1/2 cucharadita de sal
2 cucharaditas de esencia de vainilla
175 grs. de mantequilla troceada
4 huevos medianos
125 ml. de nata o leche
Mermeladas de sabores al gusto (yo utilicé de naranja amarga, frambuesa y albaricoque)
60 grs. de azúcar glass

PREPARACIÓN:

Mezclamos la levadura y una cucharadita de azúcar con el agua templada y dejamos reposar 5 minutos.
En un bol grande tamizamos la harina con el azúcar restante y la sal. Incorporamos la mantequilla y mezclamos hasta que parezcan migas.
Batimos 3 huevos con la leche o la nata y la esencia de vainilla, y lo agregamos a la mezcla anterior, amasando hasta que la masa esté humedecida.
Envolvemos en film transparente y dejamos reposar toda la noche en la nevera.

Precalentamos el horno a 180 º. Engrasamos las bandejas de horno o ponemos papel sulfurizado.
Dividimos la masa en dos, reservamos una en la nevera hasta el momento de utilizarla, y extendemos la otra con ayuda del rodillo sobre la superficie enharinada; formando un cuadrado de unos 30 cm. de lado. Cortamos en cuadrados de unos 10 cm.

Ponemos una cucharada de mermelada en el centro de cada cuadrado. Hacemos unos cortes de unos 5 centímetros en todas las esquinas, doblamos una esquina sí y una no, uniéndolas en el centro. Las colocamos en la placa de horno y hacemos lo mismo con la otra mitad de masa.

En un cuenco batimos un huevo con una cucharada de agua y pincelamos todas las pastas.
Horneamos a 180º unos 30 minutos, si hemos puesto las dos bandejas en el horno, cambiaremos su posición a mitad de cocción.

Una vez horneadas las enfriamos sobre una rejilla.
Mientras se enfrían, mezclamos el azúcar glass con dos cucharadas de leche o nata. Vertemos el glaseado en hilillos sobre las pastas.